La historia nos presenta a dos familias amigas que quieren celebrar la nochevieja juntas. Por un lado tenemos a Nina y a Dredrik padres de Smilla y a Lollo y a Max los padres de Jennifer, la desaparecida. El problena aparece cuando tras la fiesta: Jennifer no aparece. Nadie sabe que ha pasado, pero todo girará en torno a la niña. Una serie de sucesos increíbles, un entramado muy curioso. Todo se basa en encontrar a la niña, pero ¡menudas verdades y tramas encierra el libro! 

La estructura del libro es la siguiente. Está dividido en cuestión de tiempo, es decir, del orden en el que suceden los acontecimientos. Son un total de setenta y seis capítulos de extensión corta. 

La narración es en primera persona, es una narración coral. Debido al suceso que se narra y al entramada, podemos comprobar cómo se van sucediendo los acontecimientos. 

El lenguaje tiene un toque de misterio y envolvente. Es lo que más me ha gustado, la pluma de la autora. 

Los personajes son varios protagonistas. Son las dos parejas de las familias. No debería hablar de ninguna, por riesgo de spoiler. Esa es la realidad. Porque cada una de las partes tienen su implicación, unos padres por celebrar la fiesta y la otra pareja por permitirla. 

Lollo es la madre que ha perdido a su hija. La menciono porque sufre tanto y descubre tantas cosas que nos dará que pensar a lo largo de todo el libro. Para mí, ha sido el personaje más redondo de todos. Esa  es la realidad. 

De los demás personajes no voy a hablar, porque no quiero destriparos nada de nada. 

Mi valoración final es la siguiente: Secretos, mentiras y una desaparición. Todo se descubrirá en un entramado increíble. Descubriremos que fue lo que le ha ocurrido a Jennifer esa noche, la noche de fin de año. Debo admitir que a lo largo del libro dan algunas pistas falsas que nos llevan en una dirección y van plantando semillitas para la realidad y eso ha sido increíble. He estado en suspense todo el libro. Sin ninguna duda lo recomiendo, aunque los libros de desapariciones normalmente encierran un entramado muy de actualidad y hasta aquí puedo leer. 

Mi puntuación es de tres estrellas y media sobre cinco.

Antes de nada, me gustaría contaros que este libro lo he leído antes que nadie porque he sido elegida en el REP Search de la autora. 

La historia nos sitúa en Alaska. Allí Nivi va saltando de un hogar en acogida a otro, hasta que encuentra el suyo. Su hogar. En Kenai encontrará todo lo que estaba buscando, Robert y Marianne son los padres de acogida perfectos. Tienen a varios chicos bajo su custodia. Tenemos a Kenan, a Kate, a Becca y a Kyle. Por un lado, Kate será su mejor amiga porque ambas tienen la misma edad, pero Kenan será mucho más. Hay demasiado hype en todo el libro. Hay sucesos que ocurren de forma natural. Nivi siente tanto que hace que te emociones al leer el libro. Me atrevería a decir que Nivi es de los personajes más entrañables de Irene. Y ya sabéis que la serie Hielo y Nieve me ha encantado. Os recuerdo las reseñas: OJOS DE HIELO Y PIEL DE NIEVE Y EL COLOR DEL HIELO Y EL SABOR DE LA NIEVE

La estructura es propia de las autora, son cuarenta capítulos de extensión media. De hechome atrevo a afirmar que el libro se le quedó muy largo y por eso ha hecho dos partes. 

La narración es en primera persona. Es Nivi quien nos cuenta su historia. Llena de sentimientos y mucha amistad. 

El lenguaje es juvenil, sencillo y muy claro con respecto a todo lo que sucede. Es el claro ejemplo de la agilidad que tiene el libro.

Los personajes es la protagonista: NIVI. 

Nivi es una chica que no ha tenido suerte en la vida. Porque no tiene familia, todo cambia cuando llega a la casa de acogida de Robert y Marianne. La pelirroja se guarda para sí todos sus sentimientos durante todo el libro, porque cuando se deja llevar se tuerce todo. No entiende lo que es el amor. No sabe qué siente, lo único que sabe con certeza es que no quiere perder a su amiga: Kate. 

Además de ella, tenemos a Mariane y Robert que son los padres de acogida. Kenan es el chico mayor de la casa. Kate es su mejor amiga y tienen la misma edad. Y por otro lado, los pequeños: Becca y Kyle. Creo que hay un guiño al personaje de Alek de otro de sus libros tremendo. 

Mi valoración final es la siguiente: Me atrevería a decir que es el mejor libro de Irene Romo. Me he leído todos sus libros y creo que es el mejor. Nivi es especial. No sabe lo que es un hogar hasta que llega a Kenai. Una descripción impecable y una ambientación inmejorable. Es una historia diferente a todo lo que ha escrito la autora hasta ahora, puede que sea un poco lento por momentos y se centre demasiado en Nivi, pero es que es su historia. Le falta un pelín de acción, pero es el primer volumen y necesitamos el segundo, ya. Por otro lado, me ha faltado conocer un poco más a Kenan y al resto de la familia. 

Mi puntuación es de cuatro estrellas y media sobre cinco.

La historia nos presenta a Clover Wilson. Sus padres se han separado y su madre se va a volver a casar Por eso se encuentra en un cllub de striptease leyendo un libro. Sí, como lo lees, en vez de mirar a los estríper se pone a leer. El problema aparee cuando el stripper la saca a ella al escenario a bailar. Desde ese día no se lo quita de la cabeza. Pero el destino es caprichoso y hace que se reencuentren de nuevo.  

La estructura es la siguiente, son un total de cuarenta y dos capítulos de extensión media. 

La narración hace que conozcamos a ambos. Por todos es sabido que yo adoro la narración en primera persona, pero en este libro el narrador es omnisciente.  

El lenguaje es romántico, hay escenas eróticas. Dejo un par de frases que he subrayado: 

"¿Acaso te da miedo que si descubres que no soy un capullo no pueda no caer en la tentación de desearme?"

"Hay heridas que nunca se curan y que inevitablemente marcan tus pasos para siempre."

Los personajes son los siguientes: 

Clover es una chica buena que está un poco estresada por el divorcio de sus padres. Ella que inicia una etapa en la universidad y era de lo único que debería preocuparse. Volvemos a tener compañera de cuarto odiosa, algo muy recurrente. Familia desestructurada con sorpresas. 

Carter es el novio de su compañera de cuarto también es el estríper. Trabaja en la piscina donde le han dado trabajo a Clover y empieza un juego con manzanas. Tienen un número exacto de ellas y no deben caer en la tentación. Además, Carter tiene un pasado turbio y Rosa está unida a él en todos los aspectos. No lo tendrán fácil. 

Mi valoración final es la siguiente: Cuando has leído tanto a una autora hay unos libros que te gustan más que otros. Mi problema vino cuando el último libro que había leído suyo me encantara. En este libro hay erotismo, una tentación en forma de manzana al más puro estilo Blancanieves. Dos chicos llenos de clichés que si orfanato, separación de padres, etc. Carter como personaje es muy redondo, pero a Clover la engullen los problemas. Es cierto que a medida que avanza se pone interesante, pero ha sido casi al final del mismo. El juego de las manzanas es lo que más me ha gustado y el plot twist del final lo que le ha dado más interés a la trama. Con este libro he aprendido a pausarlo cuando no te lo está transmitiendo todo. En la segunda relectura lo he disfrutado más. 

Mi puntuación total es de tres estrellas sobre cinco. 

Antes de nada, me gustaría contaros que este libro lo he leído tras la lectura conjunta con Fransy de Las lecturas de Fransy

La historia nos sitúa en Cherry Hill de nuevo, el camping vacacional al que los niños y los no tan niños disfrutan haciendo actividades como recogida de residuos en las playas, etc. Allí es donde está Curtis, el jefe del recinto. Y por otro lado está Cinna su secretaria. No es necesario haber leído el primer libro para leer este, pero sí sería de utilidad. Así conocemos la historia de Indiana, la amiga a la que Cinna echa tanto de menos. El problema de este libro es una invasión tecnológica. La robótica quiere implantarse y todos creen que sus puestos de trabajo peligran. La verdad es que los continuos enfrentamientos con los que tiene que lidiar Curtis hacen de la novela aún más entretenida. 

La estructura es propia de las autoras, son veinte capítulos de extensión media.

La narración es omnisciente es un narrador en tercera persona quien nos narra lo que ocurre día a día en el camping.

El lenguaje es juvenil, sencillo y muy claro con respecto a todo lo que sucede. Es el claro ejemplo de la agilidad que tiene el libro.

Los personajes son los protagonistas: Curtis y Cinna.

Curtis es el jefe. Es buena persona, trabajador, pero tiene mucha carga del pasado que le impide dejarse llevar en las relaciones. Es tan cerrado que provoca continuos malentendidos y situaciones complicadas. Aunque Elliot le echa un cable para que se comprenda a sí mismo, en ocasiones, ni con esas... 

Cinna es trabajadora como la que más. Es valiente y parece una persona distinta al verano apsado por una situación familiar que le ha tocado vivir. En esta entrega saca todo su carácter a relucir y luchará por lo que verdaderamente quiere. 

Mi valoración final es la siguiente: Ya en el volumen anterior me moría de ganas de conocer en profundidad la historia de Cinna, ¡no me esperaba menos! Cinna me ha cautivado, Curtis me puso muy nerviosa con sus tiras y afloja y parecía que no se enteraba de nada. El plus a la novela se lo ha dado el personaje de Neil con su programa de robótica. La vida en el cámping ya no es lo que era, ha llegado la invasión robótica y un mal tiempo que parece ponerse de acuerdo con los protagonistas y su estado de ánimo. Lo mejor ha sido la trama y el humor de los personajes y me muero de ganas del tercer volumen. 

Mi puntuación es de cuatro estrellas y media sobre cinco. 

La historia nos presenta a Colin y a Sophie. Sophie vive con su madre y su abuela en Reino Unido, aunque tenga a su padre en Barcelona. La trama nos presenta la vida de ella y cómo conectó con Colin en el momento en que se conocieron. Sus vidas no dejaran de cruzarse a lo largo de los años. Aparecerán varios personajes como: Jess, su amiga de Bristol la que sabe la historia de Colin. Su padre, la mujer de su padre: Carla y Oliver, el influencer. Me ha gustado cómo se han conocido. Lo tenía que decir.

La estructura del libro es peculiar, pero adecuada. Por un lado, está dividida en partes, son seis en total. A su vez son cincuenta y nueve capítulos. Y por el medio hay unas escenas de la actualidad que transcurren en Bristol en el año 2025.

La narración es en primera persona. Es Sophie quien nos narra su historia, sus flashbacks lo que ha ocurrido en su vida y sobre todo su historia con Colin.

El lenguaje es juvenil, pero tiene todas las vibras que me ha transmitido la autora.

Los personajes son los dos protagonistas, aunque me hubiera gustado conocer la historia desde el punto de vista de Colin.

Sophie es soñadora, alegre y divertida. Es una chica a la que le gusta mucho su vida familiar y amistad. Se ve en cómo va a Barcelona a ver a su padre, en cómo se relaciona con sus amigas de Barcelona y los de Bristol. Ella tiene una gran evolución a lo largo del libro, tras sus encontronazos con Colin

Mi puntuación es de tres estrellas sobre cinco, porque es de los cliché que menos me gustan. 

La historia nos presenta a Eli, Eliodora, aunque sus amigas y compis de piso le llamen Elisenda. Ella no sabe cómo acercarse a su vecino de enfrente. Óscar es el vecino del que todo el vecindario habla, todos quieren saber su orientación sexual. Nadie lo sabe y en la comunidad de la calle Julio Cortázar tienen que saberlo todo. El problema es que llegan a un acuerdo, uno un poco difícil porque deben estrechar vínculos. Aunque todas las señales indican que es gay. 

La estructura es la siguiente, son un total de treinta y un capítulos de extensión media. 

La narración hace que conozcamos a ambos, unos capítulos los narra Eli y otros Óscar. 

El lenguaje es directo, sencillo y es Eleanor Rigby en todo su esplendor, con las frases de Bad Bunny en sus canciones, con las continuas referencias a series y películas vistas por mí. Me encanta. Os dejo alguna frase: 

"Verlas maquinar es todo un espectáculo. Se montan unos diálogos improvisados que ya quisieran algunos monologuistas para sus espectáculos."

"Sí, mirarlos es doloroso, pero a lo mejor lo que duele no es lo que he perdido, sino lo que me estoy perdiendo."

"Yo no quiero mirar por la ventana. Quiero mirarte a los ojos. Quiero estirar la mano y poder tocarte."

Los personajes son los siguientes: 

Eli tiene un trauma del pasado, en realidad tiene dos, uno es su padre y el otro se llama Normand. El problema es que se ha enamorado de su vecino de enfrente y se trata de autoconvencer que es gay. Todo lo indica, según ella. Nos reiremos muchísimo con su personalidad, porque es callada, pero también atrevida, como canta Bad Bunny. 

Óscar es profesor de Educación Física, además de profesor de yoga y es el vecino de enfrente de Eli. Sabe que toda la comunidad anda en busca de averiguar su sexualidad, por ello juega al despiste. El problema es que Eli se ha metido en su vida. Y por una situación un poco embarazosa la necesita. Y sobre todo necesita librarse de las conjeturas de sus hermanas: Caliope, Violeta y Allegra. 

Mi valoración final es la siguiente: La serie Juntos y Revueltos es todo un vecindario cotilla. Teniendo en cuenta que esta historia se centra en averiguar si el vecino enfrente de Eli y Tamara es o no gay. Por ello, habla de los estereotipos de género y de la frágil masculinidad, que no se te caen los anillos por hacer yoga. Eli tiene muchos demonios que impiden que se deje querer por los demás. Pero se muere por descubrir si su vecino de enfrente es gay o no, o a lo mejor prefiere que lo sea. Eli se infravalora constantemente. Trata temas tan importantes, como el miedo a volar, familias complicadas o cómo es la convivencia con tres hermanas. Eleanor hace que te rías, te entusiasmes, reflexiones y es imposible no sentirse identificada con alguna trama. ¡A por el último de la serie!

Mi puntuación total es de cuatro estrellas y media sobre cinco. 

Antes de nada, me gustaría agradecer a Fransy de Las lecturas de Fransy la creación de la lectura conjunta. Tengo pendiente otra novela de la autora que me ha regalado él y ahora mismo necesito leerla.

La historia nos presenta a Claudia que ha cumplido condena por algo que no ha cometido, pero que no tuvo pruebas. Ahora busca trabajo y Mario necesita a una psicóloga para que se encargue de su hermano pequeño. Él lo único que quiere es que lo dejen en paz y por ello, ni contesta al teléfono. Es un poco workaholic, aunque lo niegue. No puede vivir sin su trabajo o mejor dicho no sabe hacerlo. Pero llegará ella y pondrá su mundo patas arriba, porque conocerá al adolescente que esconde Sergio y todo lo que le ocurre.

La estructura es la siguiente es un libro que tiene tres partes y cuarenta y seis capítulos. Es un libro bastante gordito, pero que tiene los capítulos entre medios y cortos. Eso sí, hay partes que se podrían haber resumido un poco más. Doy fe.

La narración es omnisciente. Es un narrador externo quien nos cuenta lo que sucede en la vida de los tres personajes de este libro.

El lenguaje es directo, sutil y mostrar los sentimientos o mejor dicho los estados de las emociones que todo ser humano tiene, ha sido increíble.

Los personajes son los tres protagonistas: Claudia, Mario y Sergio.

Claudia es la que busca trabajo y para ello oculta parte de su pasado. Debe poner orden y para ello arrasa como un huracán. No se rinda en llamar quinientas veces aunque éste no le responda. Tomar decisiones que no le correspondan entre otras cosas. Claudia es muy intensa. Tiene una maleta pesada en su espalda, pero sabe salir a flote.

Mario es abogado. Solo vive para su trabajo. Tras la muerte de su madre es el tutor legal de su hermano pequeño: Sergio y su relación es casi nula. No se implica en nada que tenga que ver con él y por eso ha contratado a Claudia que como es psicóloga debe lidiar con el adolescente.

Sergio es el aborrescente, uy, perdón el adolescente. Es el chico con el que Claudia debe trabajar codo a codo. Tiene mucho que contar y muchas decisiones por tomar. Nos hará ver cómo se supera un duelo a estas edades.

Mi valoración final: Tengo que empezar diciendo que nunca había leído a la autora y, ¡lo que me estaba perdiendo! Reconozco que me ha sorprendido mucho. Aunque he conectado más con la historia al principio y he sufrido. Porque hubo momentos de risa, de llanto, de enfado y sobre todo de añoranza. Por eso, me atrevo a decir que es una novela complicada y hay partes que se podrían haber resumido, pero me quedo con el mensaje. Me ha encantado la capacidad de la protagonista de partir su chicle de menta y tomar un té, una experiencia única. Añado que me quedo con la autora.

Mi puntuación es de cuatro estrellas sobre cinco.