Título: Mi vida es sueño
Autora: Merche Diolch

Número de páginas: 256
Lanzamiento: 11/02/2019

Precio:16,90€

Eres fuerte… No sufres… No lloras… Estás… rota. 
Mimi lucha cada día por seguir adelante tras lo vivido hace un año. Interpreta un papel por su familia a la que adora, porque puede soportar su dolor, pero no el de la gente que quiere. Es por eso que se levanta cada mañana con el propósito de conseguir que sea un poco mejor que la anterior… Por ellos. Hasta que se reencuentra con él… 
Solo eran unas vacaciones familiares, nada complicado para mantener su imagen, pero con lo que Mimi no contaba era con Dante. Su amigo de la infancia, su confidente, su antiguo amor… Al que no ve desde hace mucho tiempo y que, por casualidades del destino, pasará las vacaciones junto a ellos. 
Le había olvidado… Le odiaba… Se mentía.

Antes de empezar me gustaría agradecer a Ediciones Kiwi el envío del ejemplar para reseñar.

La historia está marcada por la enfermedad que la madre de la protagonista Minnie ha padecido. Toda su familia se deshizo tras saber que su madre padece Alzheimer. Deja dos niños y un padre roto porque hizo todo lo posible por cuidarla. Pero intentan seguir con sus vidas. Mientras ella sigue ingresada en el hospital. Por eso se van de vacaciones a casa de unos amigos, el problema es que no avisan a Mimi hasta que llegan...

Y ella al principio está un poco cabreada y sobre todo se cierra en sí misma. Sabe que tiene que pasar las vacaciones con su exnovio aún encima, durmiendo puerta con puerta. Y los padres de ambos quieren que arreglen lo suyo a toda costa, casi no se les nota....

La estructura es la siguiente son un total de cincuenta y dos capítulos cortos y un epílogo.

La narración empieza siendo omnisciente. El narrador es en tercera persona y es externo. Pero a
medida que continúas la lectura tiene variaciones. Unas veces narra Dante, otras Mimi y en los demás capítulos sigue predominando la tercera persona. Y cabe destacar que los capítulos en los que narra ellos son mucho más cortos que el resto.

Los personajes son dos familias. Pero los protagonistas son sus hijos. Mimi y Dante.

Mimi, cuyo nombre completo es Minnie. ¡Sí! Como Minnie Mouse, la ratona. Nuestra protagonista ha perdido la cuenta de la cantidad de veces que se lo han dicho. Está enfadada con el mundo por así decirlo. Ha dejado de dibujar y de visitar a su madre en el hospital. No es ella misma porque no se siente completa. No exterioriza sus sentimientos y se los guarda todos. Siempre está pensando en el "Y sí..."

Dante es un chico que es amigo de Mimi desde hace muchísimos años. Es atento, cercano y muy cariñoso. Se preocupa mucho por sus amigos. Se llama como el creador de la divina comedia. Y es un personaje masculino de los que quedan pocos. Le gusta el surf y debe seguir con su tesis de investigación. Le encanta lo que  hace. Pero está incompleto. Él es consciente y se queja, lo intenta y aunque tropiece lo vuelve a intentar. Intenta comprender a Mimi pero le cuesta mucho trabajo. Un día intenta sorprenderla con un desayuno sorpresa y ahí descubrimos que la cocina no es lo suyo. Así que, no le llaméis para cocinar. O mejor dicho, ¡no le distraigáis! 

Ian es el hermano menor de Mimi, es un niño. Del que poco se sabe. Me hubiera gustado conocerle más. Con lo único que me he quedado es que se molesta cada vez que dicen "cosas de mayores" algo que es muy común en niños pequeños.

Javi, Isma, Sam y Quique son la pandilla de amigos de Dante que desde que Mimi no ha vuelto por allí siguen unidos pero la echaban de menos. Son unos personajes secundarios entrañables. Porque unos le echan en cara a Mimi sus actos porque se preocupan por Dante. 

"- ¿Sabes que tienes alma de poeta?

Él se acercó hasta su boca y susurró:

- Llevo el nombre de uno... - indicó sellando sus palabras con un beso. "

Mi valoración final es al siguiente, es la primera historia que leo de la autora. Y no me ha decepcionado en absoluto. Se preveía como una historia de romance común y así ha sido. Así que, puedo decir que ha cumplido mis expectativas. La escena de la cocina fue de mis favoritas. Y la protagonista femenina no me ha llegado del todo. He sentido mucha más empatía con Dante. Pero es una historia muy bonita porque trata de como el primer amor no se olvida y de cómo sobreponerse ante una enfermedad de un familiar cercano. Sin dejar que te consuma demasiado por dentro.

Mi puntuación es de cuatro estrellas y repetiré con la autora cuando se me presente otra oportunidad. Cabe añadir que me leí el libro casi en su totalidad en el trayecto en bus. Y fue muy ameno.