La historia nos presenta un caso policial. Andrea Monturiol es condenada por triple asesinato, el problema es que ha matado a sus padres y a su hermano. Es hija de Bernat, el gran tenor y Gisela, una famosa periodista.  Cumple condena en un centro penitenciario psiquiátrico del que se ha fugado. Es ahí donde la subinspectora Laura Ortiz y el sargento Enric Valss inician la investigación. Les llevará a sobreescriobir los hechos y a descubrir quien es realmente el culpable. 

La estructura es la siguiente, está dividido en veintinueve capítulos. 

La narración es en tercera persona, es un narrador omnisciente quien narra esta novela y el más acertado. 

El lenguaje es directo, sencillo y lleno de referencias al mundo policial y a la salud. 

Los personajes son los protagonistas:

Mi valoración final es la siguiente: Es una novela policiaca, pero con el misterio de descubrir si la sentencia ya producida es la acertada. Creo que esa frase es la que más resume la novela. Andrea Monturiol la condenada del crimen de tres miembros de su familia ha huido. La novela hace una crítica a las prisiones, a los centros de salud mental, al maltrato, la gestión policial. Es una trama tan bien hilada que te hace reflexionar. Las cartas que intercalan la novela y la forma de narrar de la autora hace que tengas ganas de seguir leyendo. 

Mi puntuación es de cuatro estrellas  sobre cinco.