Antes de nada, admito que me estaba muriendo por leerlo, pero he sido buena y he esperado a la Lectura Conjunta organizada por mi amigo Fransy de Las Lecturas de Fransy. Y a mi querida Arianne por este libro. ¡Quiero más!

Es el cuarto libro que leo de la autora y la seguiré hasta el infinito y más allá. Esa es la verdad. La historia de este libro nos presenta a Sarah  que está deseando irse a la otra punta del país y dedicarse a estudiar medicina. Porque su familia quería que fuera patinadora profesional, pero desde hace un tiempo, no tiene ánimo para patinar de esa forma. Y por otro lado tenemos a Matt en cambio, viene de una familia adinerada y el sueño de su padre es que estudie empresariales y dedicarse a la empresa familiar. Aunque el sueño de él es dedicarse al hockey. Además de que ya sabe con quién se va a casar y todo…

La estructura es la siguiente son un total de veintisiete capítulos con un epílogo. 

La narración es muy bonita. Es en primera persona, narrada por ambos. Es decir, unos capítulos los narra Sarah y otros Matt.  Además de que tiene ese tono pícaro que caracteriza a la autora.

El lenguaje es juvenil, tiene expresiones muy propias de Arianne. Pero es un libro tan bonito que la amistad es la trama principal.

Los personajes son los dos protagonistas: MATT y SARAH.

SARAH es la protagonista femenina. Es expatinadora profesional y se va a Yale a estudiar lo que ella quiere. Es una chica con las ideas claras que ha encontrado en Matt su punto de apoyo, aunque su mejor amigo Dan siempre está ahí para ver películas a distancia aajaja.

MATT es el capitán del equipo de hockey. Quiere dedicarse profesionalmente a ello, pero no se atreve a decírselo a su padre. En realidad, no se atreve a decir nada porque es un cobarde.

Además de ellos dos están la compañera de habitación de Sarah y su novia.  

Mi valoración final es la siguiente: Es un libro divertido, feel Good, un Friends to lovers en toda regla con una historia a fuego lento que se va cociendo poco a poco. Es un libro especial y es que YALE mola mucho. Eso unido a la pluma de Ari, no puede ser más intenso. Es un libro corto que lees rápido porque las hojas se pasan solas. Mi favorito ha sido lo del tráfico de galletas y reconozco que tiene algo muy típico de la autora: el Starbucks ajajaja. Tiene representación LGTB y muchas escenas muy tiernas. Es un libro precioso tanto por dentro como por fuera.

Mi puntuación obviamente es un cinco estrellas sobre cinco.