Este libro lo he empezado a leer en Menorca. Lo he escogido porque estaba muy feliz de vacaciones y a veces se necesita leer algo de dura realidad. Gracias Abril Camino por escribir algo tan duro y hacerlo tan bonito.

La historia nos presenta a Lena y a Javier. Es de las historias más duras que he leído. Empieza con Elena saliendo de la cita del oncólogo de su marido donde le han dado la peor de las noticias: “El cáncer se ha expandido y no se puede hacer nada. Solo le quedan meses de vida.” Con esta información, vuelve a casa. Decide guardar el secreto a su marido y a sus dos hijos: Mateo y Dani, para que no sufran. Así es como vamos viendo cómo es du día a día y conocemos el pasado de ambos y su bonita historia de amor.

La estructura es la siguiente: son un total de trece capítulos con un capítulo en medio narrado en pasado, en él nos cuentan algún fragmento de su vida pasada.

La narración es en primera persona. Narra Lena porque es la protagonista de la historia. Es el reflejo perfecto de que si el amor es de verdad no duele.

El lenguaje es tan frágil y emocionante que durante la lectura soltar alguna lagrimilla es inevitable. Os dejo una frase:

“Pero la felicidad es un frágil estado de ánimo. Como una copa del cristal más fino del mundo, tallada al mínimo detalle, pero apoyada en equilibrio inestable junto al borde de una mesa. Un día, tu vida es lo más bonito que has visto jamás y sientes la alegría explotando como fuegos artificiales dentro de ti... y, al siguiente, todo se rompe en mil pedazos sin que puedas hacer nada por evitarlo.”

Los personajes son los dos protagonistas: Lena y Javier. Aunque la que lleva el peso de la trama es Lena y sus sentimientos.

Lena es la hermana de Miguel. Cumple el tópico de enamorada del mejor amigo de mi hermano. Pero, el amor es inevitable y hay que luchar por él. Lena nos va contando su historia con Javier poco a poco. Sin dejar ningún fragmento de su vida. Así es como en los trece capítulos intercala un capítulo del presente con otro del pasado.

Javier es el mejor amigo de Miguel. Javier lleva toda la vida enamorado de Lena. Y aunque, cuando el diagnóstico dio un giro de 180º a su vida, hace lo posible por VOLAR. Digo VOLAR porque es piloto, siempre ha querido serlo.

Tenemos a sus dos hijos: Mateo y Dani. Mateo es el mayor, ya tiene dieciocho años y tiene algunas responsabilidades de más. Y Dani es superdotado y es Potterhead. Vive su obsesión con mucha entrega y ¡alucináis con la trama de Dani! Solo tiene ocho añitos.

Mi puntuación es de cuatro estrellas sobre cinco.