Una leyenda antigua cuenta que cuando nacemos somos separados de la mitad de nuestras almas y que esa fracción de nosotros mismos da vida a otra persona.
La mayoría recorre el mundo en busca de aquella persona a quien llaman alma gemela.
Algunos la encuentran, otros buscan sin descanso, pero sin éxito.

Por fortuna, yo lo encontré, aunque de un modo poco común.

¿Puedes enamorarte de alguien a quien solo has visto en tus sueños?

Yo creo que sí…

Yo lo hice.

Antes de empezar me gustaría comentaros aunque seguro que lo habéis visto por twitter que he disfrutado de esta lectura gracias a el #ClubLunero como siempre, os repito que a la derecha del blog tenéis un enlace a él por si os queréis unir en alguna de las lecturas conjuntas que hacemos gracias a La Reina Lectora. 

La historia trata sobre Fleur Lefebvre, la hija del embajador que vive con su padre porque su madre ha muerto. Su padre quiere la hija perfecta y ella le guarda rencor. Aunque la trama principal es cómo vive en su mundo de los sueños y allí conoce a un chico

La estructura del libro es simple, está divido en partes no numeradas. Y está repleto de letras de canciones que han sido lo que más me ha gustado porque eran muy bonitas.

La narración es en primera persona por lo que conectamos con Fleur ya desde el principio.

El lenguaje es simple pero he encontrado alguna que otra falta de ortografía que no me ha gustado mucho. La verdad, es lo que más me ha fallado en este libro es la coherencia entre algunas situaciones y sobre todo en actos. Eso sí la ambientación en Japón y París ha sido maravillosa.

De entre los protagonistas están Fleur y Yori.

Fleur es francesa, su madre falleció cuando ella era muy pequeña y vive con su padre que al ser embajador viaja mucho. Es prepotente y orgullosa pero es luchadora. Lleva once años soñando con un chico del que no sabe su nombre pero se enamora de él. Le encanta la música y quiere ser cantautora como lo fue su madre. 

Yori es un amigo increíble, es cantante y como Fleur también adora la música. Cuando se conocen por casualidad, entre ellos hay confusión.

Por otro lado, están los amigos de Fleur como Kenya, André, Millet, Liam y Yoko que algunos llevan máscaras puestas y te sorprenden a medida que la trama avanza. Además está Reira la hermana de Yori.

El embajador Lefebvre admito que ha sido uno de mis personajes favoritos porque por momentos era "el villano" de la historia porque discute con su hija y no la apoya demasiado. Aunque también llega a ser su aliado, hay que tener en cuenta que es su padre pero aún así algún que otro comportamiento decía lo contario.

Mi valoración final no es tan buena como me gustaría que hubiera sido. La verdad es que logró engancharme pero aún así no me llegó del todo. No es un libro para mí y mirad que me gusta mucho la romántica pero no logró enamorarme de él. Los personajes también me han fallado un poco, no estaban bien desarrollados.
Por eso mi puntuación es de dos estrellas; como siempre os dejo mis redes sociales.