Antes de nada, me gustaría deciros que el segundo tomo de Nivi ha superado mis expectativas. 

La historia nos sitúa en Alaska, de nuevo. Allí Nivi se ha instalado en Kenai. Donde vivió con su familia de acogida, donde conoció a su mejor amiga y se enamoró. Kenan, Kate,  Becca y Kyle seguurán presentes. De Kate no puedo hablar, de Kenan, ay.... Kenan, solo que regresa a Kenai. Ahora afirmo con rotundidad que Nivi es de los personajes más entrañables de Irene. Y ya sabéis que la serie Hielo y Nieve me ha encantado. Os recuerdo las reseñas: OJOS DE HIELO Y PIEL DE NIEVE Y EL COLOR DEL HIELO Y EL SABOR DE LA NIEVE

La estructura es propia de las autora, son treinta y dos capítulos de extensión media. 

La narración es en primera persona. Es Nivi quien nos cuenta su historia. Llena de sentimientos y mucha amistad y amor. 

El lenguaje es sencillo y muy claro con respecto a todo lo que sucede. Es el claro ejemplo de la agilidad que tiene el libro. Aunque los protagonistas han crecido. 

Los personajes es la protagonista: NIVI. 

Nivi es una chica que no ha tenido suerte en la vida. Pero todo cambió el día en el que Marianne y Robert le dieron un hogar. Ahora le han dejado su negocio y es ella la que lleva la inmobiliaria. Además es mamá de acogida de dos gemelos que la traen por el camino de la amargura. Jjajajaj. 

Kenan ha regresado a Kenai con una niña pequeña de la mano. Quiere recuperar a a Nivi, Viene a darle todas las explicaciones que le debe del primer libro. Traerá muchas sorpresas, reencuentros y mucho amor fraternal y romántico. Conocerá a Alek que como ya dije en la reseña anterior es el nexo de la serie: Hielo y Nieve. Porque Alek en este libro es adolescente y ya conoce a Ivana. No hablo más de él ajajjaaj. 

Mi valoración final es la siguiente: Me atrevería a decir que es el mejor libro de Irene Romo. Y lo peor sería que ya lo he dicho en el anterior. Nivi es única, es una mamá de acogida genial, ha madurado, ya no es la adolescente de la primera novela. Tiene toda la acción que le falta al libro anterior, porque Kenan vuelve a escena para dar explicaciones. Trata sobre la familia, el hecho de que no sea de sangre, sino de quien te quiere. Narra el duelo, pasar una enfermedad, regresar al hogar. También aparece Alek, personaje de otro libro de la serie. ¡Qué bonito ha sido estar en Kenai otra vez! 

Mi puntuación es de cinco sobre cinco.