Título: El reflejo del agua
Colección: Diario de una viajera en el tiempo nº1
Autora: Miriam Erlan
Autopublicado
Nº de páginas: 274
Género: Histórica, romántica
Precio: 10,35€ (papel) y 2,99€ (digital)
Diana
es la última descendiente de su estirpe, heredera de una antigua mansión
situada en Trasmoz (Aragón). La protagonista, en su regreso a la casa familiar,
a se verá envuelta en una serie de acontecimientos a causa de un inesperado
viaje doscientos diez años atrás en el tiempo. En plena Guerra de la
Independencia contra Francia deberá salvar a sus ancestros de comienzos del
siglo XIX. Un emocionante viaje en el que redescubrirá a sus antepasados que,
hasta entonces, solo conocía por antiguos retratos y leyendas familiares.
Samuel, un joven perteneciente a sus ascendientes, logrará despertar en ella
sentimientos inesperados.
¿Cómo afectará la transformación de los acontecimientos al presente de la
protagonista?
Diana descubrirá las claves de su vida mientras reescribe la historia del pasado de su familia y la de su propia existencia.
Diana descubrirá las claves de su vida mientras reescribe la historia del pasado de su familia y la de su propia existencia.
Antes de nada, quiero agradecerle a Miriam el envío del ejemplar para reseñar.
La historia trata sobre una familia ligada a una antigua casa que esconde un secreto que la protagonista, Diana, descubrirá en un momento crucial de su vida. A través de la protagonista viajaremos con ella a momentos históricos, en concreto al año 1808 en Trasmoz y descubriremos las costumbres de la época a la que Diana viaje.
La historia trata sobre una familia ligada a una antigua casa que esconde un secreto que la protagonista, Diana, descubrirá en un momento crucial de su vida. A través de la protagonista viajaremos con ella a momentos históricos, en concreto al año 1808 en Trasmoz y descubriremos las costumbres de la época a la que Diana viaje.
La estructura de la novela es la siguiente, está dividida en cuarenta partes de extensión media. Es una novela muy descriptiva.
La narración es en primera persona. Es Diana quien nos cuenta su historia, sus viajes y todo lo que le ocurre. Aunque a veces cambia el estilo narrativo y se vuelve omnisciente, no afecta a su lectura.
El lenguaje es sencillo. Tiene matices históricos que lo hacen especial y único. Una curiosidad del libro que me hizo mucha gracia es que no puede transportar objetos del futuro al pasado o lo que es lo mismo. Los objetos del futuro en el pasado no funcionan.
Admito que la primera parte del libro, es decir, las primeras páginas se me hicieron densas. Sobre todo, un capítulo en el que Diana cuenta su vida. Pero fue mejorando a medida que avanzaba. La abuela de Diana es super adorable.
Los personajes son varios, aunque la gran protagonista es Diana.
Diana es decidida y valiente. En su casa hay una sala de los espejos que es crucial en la novela. Su
abuela Lucía es su mayor confidente, respecto a algunas situaciones de la novela. Y habla mucho de ella.
Después está Samuel, el nieto de la señora Engracia. Un muchacho que se sorprende de todo lo que Diana le cuenta. Es un chico especial. Y necesita una prótesis. No voy a hablar más de él. Pero solo voy a añadir que fue mi personaje favorito.
La señora Engracia es amiga de su abuela Lucía. Es un personaje entrañable. Cuenta leyendas, sucesos verosímiles de una forma especial y única.
Mi valoración final es la siguiente, es una novela super descriptiva y con poco diálogo. No soy muy fan de este tipo de novelas. Entiendo que es necesario tanta descripción de ciertas situaciones, de hechos históricos para situar al lector. Pero por momentos se me hizo un poco denso. La historia en sí me ha gustado aunque ha quedado muy abierto. Sobre todo en lo relacionado con el personaje de Samuel, al que la autora podía haber explotado un poco más.
Mi valoración es de dos estrellas.
La narración es en primera persona. Es Diana quien nos cuenta su historia, sus viajes y todo lo que le ocurre. Aunque a veces cambia el estilo narrativo y se vuelve omnisciente, no afecta a su lectura.
El lenguaje es sencillo. Tiene matices históricos que lo hacen especial y único. Una curiosidad del libro que me hizo mucha gracia es que no puede transportar objetos del futuro al pasado o lo que es lo mismo. Los objetos del futuro en el pasado no funcionan.
Admito que la primera parte del libro, es decir, las primeras páginas se me hicieron densas. Sobre todo, un capítulo en el que Diana cuenta su vida. Pero fue mejorando a medida que avanzaba. La abuela de Diana es super adorable.
Los personajes son varios, aunque la gran protagonista es Diana.
Diana es decidida y valiente. En su casa hay una sala de los espejos que es crucial en la novela. Su
abuela Lucía es su mayor confidente, respecto a algunas situaciones de la novela. Y habla mucho de ella.
Después está Samuel, el nieto de la señora Engracia. Un muchacho que se sorprende de todo lo que Diana le cuenta. Es un chico especial. Y necesita una prótesis. No voy a hablar más de él. Pero solo voy a añadir que fue mi personaje favorito.
La señora Engracia es amiga de su abuela Lucía. Es un personaje entrañable. Cuenta leyendas, sucesos verosímiles de una forma especial y única.
Mi valoración final es la siguiente, es una novela super descriptiva y con poco diálogo. No soy muy fan de este tipo de novelas. Entiendo que es necesario tanta descripción de ciertas situaciones, de hechos históricos para situar al lector. Pero por momentos se me hizo un poco denso. La historia en sí me ha gustado aunque ha quedado muy abierto. Sobre todo en lo relacionado con el personaje de Samuel, al que la autora podía haber explotado un poco más.
Mi valoración es de dos estrellas.
Hola.
ResponderEliminarNo conocía el libro pero tampoco me llama mucho la atención, así que de momento lo voy a dejar pasar.
Gracias por la reseña.
Nos leemos.
Hola Carolina,
Eliminaryo conocí el libro gracias a la autora. Desde mi punto de vista me faltó más profundidad en el personaje de Samuel.
Muchas gracias por comentar.
Un besiño!